Gotas de Cristal

Gotas de Cristal

La lluvia cae lentamente, 

gotas de cristal que comparte el cielo,

su sonido, música melancólica que genera vida,

y entre el camino el agua pareciera

espejos de plata reflejando el cielo.

Entre las calles desoladas

dos pequeños jugando a cazar gotas de cristal,

y un par de enamorados debajo de un balcón 

intentado no mojarse, como si su amor

pudiera enfriarse al contacto del rocío. 

Las nubes grises con destellos de luz

comparten sus gotas para refrescarnos el día,

y entre los sonidos de sus gotas de cristal

los pequeños parecieran bailar.

La lluvia cae lentamente como gotas de cristal,

un suspiro al aire pareciera extrañar

cuan bello sol radiante que con su calor

nos abraza por las mañanas sin cesar,

e invitamos a la melancolía 

a tomar una taza de café 

y a soñar con el mañana que pronto vendrá

Y el tiempo pasó, ya la noche calló,

las nubes en calma están,

un tímido lucero en el firmamento está

y una suave brisa las buenas noches dá.

Alcides M.


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Te recuerdo

Te recuerdo

Tu recuerdo llega constante a mi corazón,

mi mente trae nuevamente tu sonrisa

y viendo el horizonte me parece ver el mar,

paz y quietud a tu lado sentía

y un beso robado era mi alegría.

Las flores del jardín parecieran extrañarte,

mi cuarto extraña tu aroma

y entre el desorden de mi habitación

una melancolía invade el ser

y un grito de agonía en el silencio pareciera esconder.

Pero recuerdo que te has ido,

y contigo te llevaste los sueños,

quedando solamente un cajón vacío 

pinturas sin terminar 

y poemas sin acabar.

Y tu recuerdo llega constante

mi corazón late fuerte, 

y nuevamente un suspiro compartido al viento

es la tristeza al ver que no estas conmigo 

y del amor que ha partido.

Alcides M. 

¿Olvidarte?

¿Olvidarte?

Y entre el recuerdo y la melancolía de un beso

que se dio en una tarde de lluvia,

donde no fue necesario decir adiós, 

donde no hizo falta decir un hasta pronto

pero si hizo falta decir: No te preocupes todo saldrá bien.

Pensando en ti cada día,

y esperando sentado en el mismo lugar

un retorno que no será, y el tiempo pasa...

el viento se lleva las hojas de los arboles

y entre el ensueño tu recuerdo permanece.

Que hago acá acompañado de la melancolía,

donde me permito extrañarte mas de lo normal,

donde el atardecer me recuerda el brillo de tus ojos

y la noche tus oscuros cabellos.

Hoy es uno de esos días 

donde con un grito en el silencio pronuncio tu nombre,

donde lloró por dentro y la soledad me consuela,

sentado en el miso lugar entre el recuerdo y la melancolía

espero algún día poder vivir sin ti 

Alcides M.

Sentado frente a ti...

Sentado frente a ti... 

Eres un alma al viento. Un hilo de luz que penetra en silencio con el calor que envuelve todo tu existir. Tocas mi piel y me robas el aliento, en mi cabeza con mis pensamientos dibujo tu imagen, y a lo lejos solo percibo tus pasos... llegas y te vas sin voltear la mirada porque apenas te conozco y gritas en mi interior dejando el ensueño que un día entre mis brazos habitarás.

Y me pregunto: ¿solo es una creación de la imaginación o un toque del azar...? sin embargo, mi piel tensa y agitada acusa tu presencia, me has dado tu calor en cada abrazo y en cada beso sin reserva de tu amor. Ahora solo me digo en que estrella te encuentras, ¿donde estas, horizonte amanezquero que brillas y no te encuentro...? ¡vuelve y quédate a mi lado! como aquellos días en que recorrías mi andar sin mover más que tus pupilas, siguiendo mi andar, sentado y sonriente cómplice total.

Alcides M.